Historieta de humor de Kiko Rivera.

Historieta de humor de Kiko Rivera.

Kiko le ha pedido explicaciones a su mujer, a la que ha visto recientemente haciéndose arrumacos con el señor del césped, recordándole que ellos habían acordado que, en caso de ruptura, el único que podía rehacer su vida era él.

Dice sentirse molesto, ya que no le cuadran las fechas de esa supuesta relación y tiene la sensación de que a Irene le han estado podando el césped desde hace tiempo… y no precisamente él.

El DJ, entre dolido y dolorido por la gota (va de mariscada en mariscada para olvidar), ha instado a su ex mujer a dejar esa relación y salir públicamente, a decir en los medios que “él sigue siendo su grandote del alma”.

Según Kiko, la mala situación en la que le deja Irene por una supuesta infidelidad le hace ver como un pésimo amante y eso puede afectar en su lucha por adelantar a Bertín Osborne como gran mujeriego nacional.

Si Irene no vuelve a casa inmediatamente, amenaza con volver a su vida de excesos, esa que tanto le gusta y lo caracteriza: noches de fiesta, churros al amanecer y selfies con desconocidos en calzoncillos cuando ya va que no conoce. “No lo hago por despecho, Irene”, habría dicho con ironía, “lo hago porque la vida sin birras ni langostinos es una porquería.”

Y, por si fuera poco, Isabel Pantoja, al enterarse del asunto, habría pedido a Irene que le presente al jardinero en cuestión, confesando entre risas que tiene el césped más abandonado que la libido de su hermano Agustín. “Dile que venga cuando pueda —habría dicho la tonadillera—, que en mi casa hace falta alguien que sepa manejar bien el cortacésped… y lo que surja.”

Kiko concluye asegurando que aún hay tiempo para reflexionar. “O dejas al tipo del césped y te haces monja, o me verás reaparecer el los platós de televisión con más fuerza que nunca… hasta el próximo jamacuco .”