Caricatura de Ozzy Osbourne.

Historias del loco más querido del rock: Ozzy Osbourne

Ozzy Osbourne no era solo una estrella del rock… era una máquina de anécdotas demenciales.

Primeros paso de leyenda.

Todo comenzó en Birmingham, Inglaterra, donde un joven Ozzy descubrió que tenía dos talentos: cantar y único en liarla parda. Cuando no estaba robando televisores (fue arrestado en alguna ocasión por ello), soñaba con ser una super estrella del rock. Y lo logró, liderando a Black Sabbath, los padres del heavy metal. Pero entre conciertos y montañas de locura y caos total, fue despedido por sobredosis de excesos. ¿Quién lo reemplazó? Nadie. Ozzy no se reemplaza, se le extraña sin más.

Personaje único.

En su carrera solista, grabó «Crazy Train», el himno de los que viajan mentalmente a la locura. Pero su momento más legendario llegó en 1982: mordió un murciélago en vivo, creyendo que era de goma. Ozzy terminó vacunado contra la rabia, pero se ganó un lugar en la historia como devorador de cabezas.

Más locuras varias de Ozzy Osbourne.

Una vez en Texas, borracho y vestido con el camisón de su esposa Sharon, orinó en El Álamo, un sitio sagrado para los texanos. Fue arrestado y casi deportado. La falta de respeto fue histórica.

Y en su reality show The Osbournes, vimos a Ozzy pelearse con aspiradoras, tropezar con perros (sin arrancar ninguna cabeza), y perder discusiones con puertas cerradas. Básicamente, un auténtico amo de casa infernal .

Ozzy caminará entre nosotros eternamente, ahora en su nuevo hogar, sigue concediendo entrevistas igual de locas y donde nadie entiende qué dice, pero todos aplauden su llegada a los infiernos.

Porque si el rock es una locura, Ozzy es su rey, su bufón y su profeta.