Viñeta de humor del Emérito y Bárbara.
El rey Emérito, Juan Carlos, puede ser tachado de muchas cosas (posiblemente la lista de descalificativos sería del grosor de un listín telefónico). (Los chavales de hoy alucinan cuando se les explica como era dicho listín, ahí es donde te das cuenta de lo viejo que estás hecho), pero de lo que no se le puede acusar, es de ser un tipo aburrido, no, de eso, no.
El rey Felipe no consigue tenerle controlado cuando regresa de puntillas a España y por todos los medios intenta que se le asocie lo menos posible a él.

Vida tranquila en Arabia.
Poco a poco vamos conociendo trapillos sucios de su pasado y nunca defrauda. Tiempo atrás tuvo que hacer las maletas y marcharse prácticamente «con lo puesto», porque en España molestó un poco que hiciera algún que otro desfalco y no encontró mejor sitio para huir del escándalo que Abu Dabi. Por fin podría montarse un nuevo harem, pero esta vez sin tener que esconderse, ya que allí la ley lo permite. A los pocos días de su estancia en los Emiratos Árabes, ya estaba completamente adaptado. «Lástima que venir aquí me ha pillado un poco viejo, pero algo haremos», ha comentado en sus redes.

Entrevista para «caricaturas y retratos».
Hemos conseguido una entrevista en exclusiva del Emérito. Ha decidido dar un paso adelante y aclararnos algunas de las cosas que se han dicho en los últimos días acerca de él.
Velizurdo.-Hola Juan Carlos, bienvenido a «caricaturas y retratos«.
Emérito.-Un placer estar aquí. Saca una cervecita o algo, ¿no, niño?
V.-En seguida la traen. ¿Es verdad que tuviste un romance con Bárbara y sufriste todo tipo de extorsiones por unas fotos comprometidas?
E.-No sé quién es esa tal Bárbara.
V.-Rey.
E.-Dime niño, dime, ¡A ver esa cervecita que no viene!
V.-No, que Bárbara Rey, digo.
E.-¡¡¡Ah, sí, Bárbara, la del domador chiquitito!!! La de veces que tuve que salir por la ventana en calzoncillos, ¡no veas qué mala leche tenía, siempre de mal humor! Pues si lo dice ella, será verdad.
V.-No lo dice ella, lo dice su hijo.
E.-¿Mi hijo?, ¡qué bribón el Felipe, se enteraba de todo!
V.-¡¡¡No, su hijo no, el de Bárbara!!!
E.-¿Bárbara?, ¿qué Bárbara?
V.-Que vaya bien la cosa, Emérito.
E.-Ponme la cervecita para llevar, majo.
Seguro que pronto seguiremos descubriendo más historias de este gracioso personaje sin igual.

Jajajajajajaja. Madre mía!!